Ofertas de Trabajo en Clinica Parroquial Inmaculada Concepción

Ubicación:

 La Libertad

Giro:

 RECURSOS HUMANOS

Descripción de la Empresa:

 La Clínica Parroquial es una organización social sin fines de lucro, creada en el año 1991 por Presbítero Rogelio Esquivel como una rama del ministerio de acción social de la Parroquia Inmaculada Concepción con el objetivo de ayudar al enfermo. Desde su llegada el trabajo pastoral no solo ha tenido prioridad de ser una Parroquia Evangelizada y Evangelizadora, sino también de mejorar el estado físico y mental de la población, de aquellas personas que no tienen las posibilidades económicas de pagar un servicio médico privado. Es así como nace la Clínica Parroquial Inmaculada Concepción ofreciendo servicios básicos de salud en el área de Medicina General, Pediatría, Ginecología y Odontología. El proyecto parroquial incluyó desde el principio el equipamiento de una clínica y desde entonces trabaja para obtener los mejores servicios en salud para todas las personas del sector. Esta obra ha sido tan conocida que se ha extendido a otras comunidades y nos visitan desde diferentes lugares como Huizucar, Sacacoyo, Tepecoyo, Ciudad Arce, San Juan Opico, San Pablo Tacachico, San José Villanueva, Puerto de la Libertad, Soyapango, Ilopango, San Salvador e Incluso de otros departamentos y nacionalidades. Todo gracias al personal altamente calificado, a la utilización de excelentes equipos médicos de última generación y con la visión de un trato con respeto, digno y humano para todo aquel que nos visite. Inicialmente se atendía un promedio diario de 160 pacientes y actualmente tiene una población promedio de 800 atendidos en las diferentes áreas de servicio. A la fecha, la Clínica se ha posicionado como uno de los centros de atención parroquial de mayor calidad en el área de Nueva San Salvador, y que día tras día buscamos la mejor forma de atención a los usuarios que nos visitan. Como dice nuestro pastor. Nos sentimos muy satisfechos de estar unidos de una manera muy especial con el que sufre. Es una dimensión de la fe.